Boda íntima

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Estoy totalmente de acuerdo con la fotógrafa Jill Thomas. Si quisiera casarme otra vez, yo también celebraría una mini-boda con tan sólo las personas que quiero de verdad. No es una cuestión económica, que también cuenta, sino es centrarse en lo que realmente es importante, dos personas que profesan su amor en compañía de las personas más importantes en sus vidas.
Estas fantásticas fotos de Jill Thomas, muestran como una boda se puede reducir a la pareja, el oficiante, y dos invitados especialísimos, los hijos. Me parecen preciosas.


Estilista: Kami Christensen
Flores: Sarah Windward



















3 comentarios:

  1. Las fotos son muy bonitas. Lo único que no veo bien, es el modo de vestir de los novios y de los niños, (ya no digo nada del vaquero), no parece muy apropiado para una ceremonia, por muy íntima que sea...Eso sí, son todos muy guapos.
    Aunque está lograda la intención de que lo único que importa es el amor de esta familia...

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  2. Si, es cierto. Están vestidos como si lo hubieran improvisado en el día. Quizás por ello resulta aún más romántico. Un fin de semana en la casa de campo y deciden casarse, ¿no?. Y se visten con lo que encuentran en el trastero.
    No analizo si es lo más apropiado y correcto, tan sólo me quedo con que las fotos son preciosas y muy románticas...

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  3. a mi me parece una Increible idea...
    la ropa es lo de menos... y que mejor que usar esos colores, para el dia exacto!

    Yo amo la idea de entre mas sencillo... mas se logra disfrutar el día.

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